Un gran número de jóvenes y adultos jóvenes, de 16 a 24 años, de la región de Kentuckiana están desconectados del trabajo y la escuela.
La desconexión de las oportunidades de ingresos y aprendizaje durante estos años cruciales de la juventud adulta es costosa para los jóvenes, los contribuyentes y el crecimiento económico. Estos jóvenes pierden oportunidades de aprender nuevas habilidades, adquirir experiencia y ampliar sus redes sociales. Los jóvenes desconectados son más propensos a enfrentarse a la pobreza y el desempleo persistentes, a tener conductas delictivas y abusar de sustancias, y a ser encarcelados a lo largo de su vida que las personas que no estuvieron desconectadas en su etapa de jóvenes adultos. La desconexión cuesta a los contribuyentes miles de millones de dólares en ayudas públicas y pérdida de ingresos fiscales. No abordar el problema se convierte en un ciclo que se autoperpetúaya que los hijos de los jóvenes desconectados se enfrentan a resultados similares a los de sus padres.
El año pasado, casi 17.500 jóvenes y adultos jóvenes en la región de Kentuckiana no estaban matriculados en la escuela y no trabajaban. Esta cifra no ha cambiado con respecto a 2022, aunque supone un descenso con respecto al pico alcanzado durante la pandemia.
Una cuarta parte de los jóvenes y adultos jóvenes negros de la región estaban desconectados del trabajo y la escuela en 2023, el triple de la tasa entre los adultos jóvenes blancos de la región.
La investigación de la Reserva Federal sugieren que la reducción de barreras es una necesidad importante para los jóvenes desconectados. Abordar barreras estructurales como la salud mental, la discriminación, la justicia penal y la falta de acceso a guarderías y transporte puede reducir la desconexión de los jóvenes. La tasa de jóvenes adultos que declaran tener problemas de salud mental ha aumentado sustancialmente desde la pandemia, lo que afecta al rendimiento laboral y a la productividad. En 2022, la tasa de jóvenes que declaraban depresión era un 50% superior a la de los adultos de más edad.
El lugar: Centro de Oportunidades para Jóvenes Adultos trabaja directamente con los jóvenes de oportunidad de la región. Los jóvenes que atienden carecen de acceso a recursos, a menudo se han enfrentado a sucesos traumáticos y viven aislados económicamente. Un aspecto clave del programa es la reducción de barreras, incluido el apoyo a la salud mental y la recuperación del trauma, la participación en la justicia, la inseguridad de la vivienda, el transporte, etc.
Para ver más datos sobre los jóvenes con oportunidades de la región, consulte nuestro Panel de Oportunidades para los Jóvenes.